Salud y medicina
Ampollas en los pies: causas, prevención y tratamiento
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Las ampollas en los pies son uno de los problemas más habituales que podemos experimentar y prácticamente cualquiera persona las ha padecido alguna vez en su vida. Puesto que pueden resultar dolorosas y dificultar el uso del calzado, te contamos por qué aparecen y qué puedes hacer para evitarlo o para acelerar su cura si ya han hecho acto de presencia.
Causas comunes de las ampollas en los pies
Antes de enumerar las causas más habituales, es importante entender qué son exactamente las ampollas en los pies para no confundirlas con otras afecciones de la piel. Se trata de una acumulación de líquido en las capas superiores de esta, lo que hace que sea visible y fácilmente palpable.
A este líquido se le conoce como plasma o suero y tiene como finalidad proteger la capa externa de la piel o epidermis. Puede ir desde el color claro, que es el más común, hasta el amarillo si hay infección o el rojo cuando hay presencia de sangre.
Dentro de las causas de su aparición, las siguientes son las más comunes:
– Uso de calzado. Una talla incorrecta, ya sea más grande o más pequeña, que sea nuevo, muy ajustado o elaborado con materiales muy duros que oprimen el pie.
– Exposición a temperaturas extremas. Caminar sobre arena o asfalto muy caliente, así como por superficies heladas que congelen la piel, o contacto con productos químicos que puedan ser abrasivos.
– Iniciar actividades deportivas, como empezar a correr.
– Presencia de espolones óseos.
– Infecciones en heridas.
– Reacciones alérgicas por contacto.
– Falta de transpiración en el pie, humedad o presencia de hongos.
En lo que respecta a los síntomas, las ampollas pueden observarse a simple vista, por lo que son fácilmente identificables. No obstante, la sintomatología implica enrojecimiento y ablandamiento de la piel, presencia de líquido si esta no se ha levantado y dolor.
Consejos para prevenir las ampollas
Si conocemos cuáles son las causas de la aparición de las ampollas, su prevención se facilita, dado que basta con tomar medidas para no encontramos en las situaciones mencionadas. Como por ejemplo, las siguientes:
Usa calzado cómodo y flexible
Busca calzado que sea cómodo y que ofrezca el espacio suficiente para que el pie se pueda mover sin opresión o fricciones. Además, también conviene apostar por materiales blandos y flexibles que se amolden con rapidez.
Adapta en casa el calzado nuevo
Cuando se trata de un calzado nuevo, se recomienda llevarlos puestos en casa antes de salir y usar calcetines que protejan de las rozaduras. Una vez que se hayan ablandado y adaptado a la forma del pie, podremos ir usándolos un tiempo mayor de forma progresiva.
Evita exponerte a temperaturas extremas
Caminar descalzos por la arena, experimentar con el hielo o la nieve o el contacto con sustancias corrosivas son acciones que fácilmente podemos evitar para no encontrarnos con ampollas en los pies.
Cuida tus pies
En lo que respecta al resto de causas, es necesario mantener una higiene adecuada para que no aparezcan hongos, secar los pies correctamente para que no se acumule humedad, hidratarlos con regularidad y prestar atención a nuestra constitución o cómo reacciona nuestra piel con el calzado que usamos.
Tratamiento casero para las ampollas en los pies
La aparición de las ampollas en los pies no se considera una afección peligrosa o que pueda derivar en complicaciones. Por esta razón, en la mayoría de los casos no es necesario siquiera intervenir, sino que la propia piel se va regenerando y la ampolla acaba desapareciendo por sí misma.
Sin embargo, puede suceder que por su ubicación o su tamaño, resulte particularmente dolorosa y queramos intervenir para acelerar su cura. De ser así, puedes llevar a cabo un tratamiento casero muy sencillo.
En primer lugar, lava tus manos y la ampolla con agua y jabón, para evitar que esta se infecte. También puedes aplicar un poco de alcohol para desinfectar la piel. Con una tijera o algún elemento punzante, debes hacer un pequeño corte en un extremo de la ampolla, pero antes desinfecta también el objeto que utilices por si tuviera bacterias.
A continuación, aprieta ligeramente para que el líquido salga, sin levantar la piel o retirarla. Aunque esté suelta, te sirve de protección para las capas más profundas y te dolerá menos. Después, vuelve a limpiar la ampolla y, si tienes, aplica una crema antibiótica. Mientras estés en casa, déjala al aire libre para que cicatrice antes, pero si vas a usar calzado, coloca una tirita o una gasa.
Cuándo buscar atención médica por una ampolla en el pie
Como indicamos, las ampollas en los pies rara vez se complican o necesitan de intervención médica. Esta será requerida cuando la causa de la aparición son los productos químicos que queman la piel; si el tamaño de la ampolla supera los dos centímetros de diámetro o si la aparición no es solo en los pies por alguna de las causas mencionadas, sino que también están presentes en otras partes del cuerpo.
Bibliografía
https://www.fisioterapia-online.com/articulos/ampollas-en-los-pies-prevencion-y-tratamiento