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¿Obsesionado con tu Salud? Cuidado con la Cibercondría

Vivimos en la era digital, que se caracteriza por el acceso ilimitado a todo tipo de información desde Internet. Dentro de esta, se incluye la relativa a la salud. Es decir, que con una búsqueda rápida accedemos a información detallada sobre cualquier patología que se conoce. Aunque puede resultar positivo para mejorar nuestro conocimiento, también es un arma de doble filo, puesto que lleva a diagnósticos erróneos. Además, cuando la búsqueda se convierte en una obsesión, se convierte en cibercondría. Hoy te contamos qué es, cómo se trata y qué hacer para prevenirla. 

    ¿Qué es la cibercondría?

    La cibercondría es un término que describe la tendencia a buscar información médica en Internet de manera compulsiva y a menudo exagerada. Las personas que sufren de cibercondría muestran una preocupación continua por su salud, lo que les lleva a navegar por todo tipo de páginas, redes sociales y foros en búsqueda de información que pueda dar respuestas a sus dudas o sospechas relativas a alguna patología. 

    Este comportamiento suele derivar en autodiagnósticos constantes que en la mayoría de los casos son erróneos, pero que causan una espiral de ansiedad y temor. Si bien hay páginas médicas oficiales en la red, también abundan aquellas que son inexactas o alarmantes y que no han sido verificadas por profesionales de la salud. Por otra parte, para realizar un diagnóstico particular es necesario conocer el historial médico de la persona y realizar una serie de pruebas que descarten otras patologías. 

    Cibercondría vs. Hipocondría: ¿En qué se diferencian?

      La hipocondría es un trastorno mental caracterizado por una preocupación persistente y excesiva por tener una enfermedad grave, a pesar de tener pruebas médicas que indiquen lo contrario. Aunque guarda una similitud con la cibercondría, dado que ambas se centran en la salud y en la presencia de patologías, también hay diferencias entre ambas. 

      Esta última es la búsqueda compulsiva de información médica y el autodiagnóstico basado en los resultados encontrados. Por el contrario, la hipocondría es solo la preocupación excesiva y persistente por tener una enfermedad grave, incluso si no hay pruebas médicas que lo respalden. 

      Otra diferencia notable es la presencia de la tecnología. Mientras que la cibercondría está estrechamente ligada al uso de esta y se caracteriza precisamente por la exposición a información no verificada en la red, la hipocondría puede surgir de diversas fuentes y puede existir independientemente del acceso que se tenga a información.

      También puede haber diferencias en cómo afectan a la vida diaria. La cibercondría puede interferir en las actividades cotidianas debido a la compulsión por buscar información, mientras que la hipocondría puede provocar evitación de situaciones que se perciben como amenazas para la salud.

      Características que presenta

        La cibercondría se manifiesta de diversas formas, pero sus características más frecuentes son las siguientes:

        Búsqueda compulsiva de síntomas en Internet

        La cibercondría se manifiesta con la tendencia a buscar de manera compulsiva síntomas y posibles enfermedades en Internet. Las personas afectadas acuden con frecuencia a los motores de búsqueda y webs médicas en busca de información sobre cualquier malestar físico que experimenten. Esta búsqueda obsesiva puede conducir a un ciclo de autodiagnóstico y preocupación constante por la salud.

        Interpretación exagerada de la información encontrada

        Una característica común de la cibercondría es la tendencia a interpretar de forma exagerada cualquier información médica que se encuentra. Estas personas perciben cualquier síntoma o indicio de enfermedad como signo de una condición grave, incluso cuando la evidencia sugiere lo contrario. Esta interpretación catastrófica puede aumentar los niveles de ansiedad y estrés.

        Cambios en el comportamiento

          Quienes padecen esta patología pueden experimentar cambios significativos en su comportamiento debido a sus preocupaciones por la salud. Por ejemplo, se pueden evitar actividades cotidianas por temor a enfermarse, con el consecuente impacto negativo en su vida social, laboral y recreativa.

          Visita repetida a páginas relacionadas con la salud

            Todos hemos buscado información médica en alguna ocasión, pero este perfil pasa una cantidad significativa de tiempo revisando las mismas páginas e intentando ampliar los datos de los que disponen y de encontrar respuestas a sus preocupaciones.

            Si te preocupa tu salud, acude a tu médico de confianza y evita autodiagnosticarte en Internet.

            Cómo actuar ante un caso de cibercondría

              Si crees que estás experimentando cibercondría o conoces a alguien que podría estarlo, algunas medidas que se pueden tomar son:

              – Limita tu tiempo en Internet. Establece un tiempo máximo para buscar información médica y reduce la frecuencia con la que consultas webs relacionados con la salud.

              – Verifica la fuente. Asegúrate de que la información que estás leyendo provenga de fuentes confiables y verificadas, como sitios web de hospitales, organizaciones médicas o profesionales de la salud.

              – Busca ayuda profesional. Cuando la preocupación interfiere en la vida diaria, hay que consultar con un médico, tanto para realizar pruebas como para valorar la salud mental.

              – Aprende técnicas para rebajar la ansiedad, como la respiración profunda o la meditación, para ayudar a reducir la ansiedad relacionada con la salud y a desviar tu atención de ella.