Salud y medicina

Linfocitos altos y neutrófilos bajos: causas

Nuestro organismo está diseñado para protegerse de todo aquello que considere que le puede poner en riego. Infecciones virales, enfermedades autoinmunes o déficits nutricionales pueden alterar un análisis de sangre y mostrar linfocitos altos y neutrófilos bajos. ¿Esta combinación puede tener múltiples significados, y hoy veremos cuáles son y sus posibles causas.

¿Qué son los linfocitos?

Los linfocitos son un tipo de glóbulo blanco fundamental para el sistema inmunológico. Se encargan de reconocer y combatir microorganismos patógenos, además de eliminar células dañadas. Por tanto, son nuestra defensa ante invasores externos, como virus y bacterias.

Se trata de células que están presentes en nuestra sangre y en el tejido linfático, y que se producen en la médula ósea. Existen tres tipos principales:

  • Linfocitos B: producen anticuerpos. 
  • Linfocitos T: destruyen células infectadas y coordinan la respuesta inmune. 
  • Linfocitos NK (natural killer): eliminan células tumorales o infectadas por virus. 

Valores normales de los linfocitos en sangre

Los valores normales de linfocitos en sangre varían entre 1.000 y 4.800 células por microlitro en adultos, y representan entre el 20% y 40% del total de leucocitos. En niños, los valores son más altos, y pueden alcanzar los 8.000.

Si los valores están por encima, indica linfocitos altos en sangre. Las causas de la linfocitosis, que son los niveles elevados, son múltiples. Por tanto, se debe consultar con un médico. 

¿Qué son los neutrófilos?

Los neutrófilos son los glóbulos blancos más abundantes y representan la primera línea de defensa contra infecciones bacterianas y fúngicas. Su función es detectar, fagocitar y destruir microorganismos invasores. Identificar el lugar de la infección y se dirigen allí para liberar enzimas que destruyen partículas extrañas. 

Valores normales de los neutrófilos en sangre

Un adulto sano tiene entre 1.500 y 7.000 neutrófilos por microlitro de sangre, y representan entre el 40% y el 60% de los glóbulos blancos. Si los valores están por debajo de los rangos normales, se puede producir neutropenia, que facilita  las infecciones. Si están por encima, se habla de neutrofilia e indica que el cuerpo está luchando contra alguna infección. 

¿Qué significa tener linfocitos altos y neutrófilos bajos? Causas de esta combinación

Qué significa linfocitos altos y neutrófilos bajos depende del contexto clínico. La combinación de neutrófilos bajos y linfocitos altos puede indicar:

Infecciones virales: gripe, mononucleosis, VIH.

– Enfermedades autoinmunes: lupus, artritis reumatoide.

Trastornos hematológicos: leucemias, linfomas

Efectos secundarios de fármacos.

Las causas de los linfocitos altos también pueden deberse a déficits nutricionales, especialmente de vitamina B12 o ácido fólico.

¿Y si solo tengo los linfocitos un poco altos?

Tener los linfocitos un poco altos no siempre indica una enfermedad grave. Puede deberse a una infección reciente, estrés físico o emocional o reacciones inflamatorias. Sin embargo, si los linfocitos elevados persisten, es recomendable realizar pruebas adicionales para descartar problemas de salud subyacentes.

Síntomas de los linfocitos elevados

El aumento de linfocitos puede ser asintomático, pero en algunos casos provoca síntomas que pueden ayudar a identificar la causa subyacente. Los síntomas de linfocitos altos más comunes son fatiga persistente; fiebre y escalofríos; inflamación de ganglios linfáticos; sudoración nocturna; pérdida de peso y dolores musculares o articulares.

¿Cómo se detecta en un análisis de sangre?

Un hemograma permite detectar linfocitos absolutos altos y valorar si hay otras alteraciones en la serie blanca. Si los valores son significativamente elevados, pueden requerirse pruebas adicionales como análisis bioquímicos, estudios de médula ósea o pruebas serológicas.

Cansancio

Linfocitos altos y cansancio suelen ir de la mano, ya que muchas de las condiciones que provocan linfocitos elevados también generan fatiga prolongada. Esto ocurre en infecciones virales, enfermedades autoinmunes y algunos trastornos hematológicos.

Linfocitos altos: ¿Cuáles son las consecuencias o riesgos asociados?

Qué causan los linfocitos altos depende de la patología subyacente. Si la causa es infecciosa, el recuento suele normalizarse tras la recuperación. Sin embargo, valores persistentemente elevados pueden indicar trastornos más serios, como leucemia linfocítica crónica o linfomas, que requieren evaluación médica.

Linfocitos altos en niños

Los linfocitos altos en niños son comunes, ya que su sistema inmunológico está en desarrollo y responde con mayor intensidad a infecciones. No obstante, si los niveles permanecen elevados sin una infección evidente, es importante descartar problemas inmunológicos o hematológicos.

Neutrófilos bajos: ¿Cuáles son las posibles causas?

Las principales causas de neutropenia con linfocitosis incluyen infecciones virales, enfermedades autoinmunes, quimioterapia, uso de ciertos medicamentos (antibióticos, inmunosupresores) y deficiencias nutricionales u otras causas como hipertiroidismo o hepatitis. Tener linfocitos altos y neutrófilos bajos puede ser un hallazgo transitorio, pero si persiste, es importante investigar la causa.

Relación entre linfocitos y neutrófilos en la inmunidad del cuerpo

El equilibrio entre neutrófilos y linfocitos es esencial para la inmunidad. Mientras los neutrófilos actúan como primera barrera frente a infecciones bacterianas y fúngicas, los linfocitos desempeñan un papel clave en la inmunidad adquirida y la respuesta a virus.

Si los linfocitos están altos y los neutrófilos bajos, el organismo podría estar combatiendo una infección viral o enfrentando un trastorno inmunológico. Qué significa tener los linfocitos altos dependerá del contexto clínico y del resto de valores hematológicos.

Conclusión

Los linfocitos altos y neutrófilos bajos pueden ser valores temporales que se producen por una infección o estrés. Pero también pueden estar relacionados con enfermedades más serias. Si un análisis revela un porcentaje de linfocitos altos por encima de lo normal o una combinación de neutrófilos bajos y linfocitos altos, lo recomendable es acudir al médico para una evaluación completa. Un diagnóstico temprano permitirá determinar si los neutrófilos y linfocitos altos representan una respuesta normal del sistema inmunológico o si es necesario un tratamiento específico.